Se puede definir la estructuración temporal como la
capacidad de situar hechos, objetos o pensamientos dentro de una serie sucesiva.
En la evolución de esta estructura influyen de manera
determinante las operaciones lógicas del pensamiento, es por ello por lo que
los alumnos que no poseen dicha forma de pensamiento tienen muchos problemas de
percepción temporal, especialmente en lo que se refiere a la ordenación
temporal.
Dentro de la estructuración temporal se pueden distinguir
dos elementos:
1.
La estructuración rítmica: capacidad para interiorizar y
ejecutar series rítmicas, y que es consecuencia de la asimilación
perceptivo-motriz del tiempo.
2.
La ordenación temporal: capacidad de ordenar sucesos o
situaciones dentro de una serie sucesiva, y que es consecuencia de la
asimilación cognoscitiva del tiempo.
Dentro de la ordenación temporal se distinguen tres niveles:
-
Un nivel referido a los conceptos y nociones básicas
temporales (antes/después, ahora/ya, rápido/normal/lento, noche/día, etc).
-
Un nivel referido a las formas (nociones) socializadas del
tiempo (semana, año, estación, siglo, etc), para cuyo reconocimiento y uso es
necesaria la utilización de operaciones de cierta complejidad del pensamiento
lógico.
-
Un nivel referido a las formas abstractas del tiempo (el
tiempo histórico) para cuya adquisición es necesario tener en pleno
funcionamiento todas las capacidades del pensamiento abstracto o conceptual.
A continuación se presentará un vídeo "El día y la noche" para que así los niños se familiaricen con la secuencia del día de forma entretenida.